Estamos a la espera del nuevo formulario de solicitud de permisos de zonas de exploración y de visita a cavidades por parte del Servicio de Patrimonio Cultural de la Consejería de Educación, Cultura y Deporte del Gobierno de Cantabria, así como de las nuevas normas de tramitación.
En este sentido, y ante determinados comentarios que están circulando en redes sociales, es necesario señalar que la Federación Cántabra de Espeleología no es quien autoriza estas actividades, sino que esa es una competencia exclusiva de la Administración regional.
La misión de la FCE, según establece el Decreto 36/2001, de desarrollo parcial de la Ley de Cantabria 11/1998, de Patrimonio Cultural, en su artículo 59, 4, es la siguiente:
"La Federación Cántabra de Espeleología, en el plazo de cinco días, deberá emitir el informe correspondiente y remitirlo al Servicio de Patrimonio Cultural de la Consejería de Cultura y Deporte. Asimismo, la Federación una vez haya estudiado de forma detallada la petición, acreditará ante la Consejería de Cultura y Deporte la solvencia espeleológica de las peticiones, desautorizándolas en caso contrario. Corresponde a la Federación, con el visto bueno de la Consejería de Cultura y Deporte, distribuir las diversas zonas de trabajo."
La Federación Cántabra de Espeleología, como federación deportiva que es, ha venido desde la promulgación del ese Decreto en 2001 tomando como criterio de solvencia espeleológica para emitir un informe favorables que los solicitantes demuestren su condición de deportistas federados en un club deportivo reconocido como tal e integrado en una Federación autonómica española, o nacional en el caso de solicitantes extranjeros. No es su función, en tanto que tal, informar sobre actividades de carácter empresarial de cualquier tipo, para las que el Servicio de Patrimonio Cultural establecerá las condiciones y limitaciones para su correcta actividad.
Sí corresponde a la FCE, con base en el mismo Decreto, "con el visto bueno de la Consejería de Cultura y Deporte, distribuir las diversas zonas de trabajo", según se señala más arriba, competencia que ejerce actualmente mediante acuerdo de su Asamblea General. Por ello, es también competente para tomar las medidas oportunas en su ámbito de actuación deportivo, en el caso de que no se respete la distribución acordada.
